Las naranjas y sus beneficios contra la obesidad

Por todos son conocidos los múltiples beneficios de este popular cítrico; está demostrado científicamente que, gracias a la vitamina C, es una fruta excelente para fortalecer nuestro sistema inmunitario frente a enfermedades comunes como gripe y resfriados (se ha demostrado recientemente que también es efectiva en la lucha de nuestro organismo contra el Coronavirus).

Además de este tipo de enfermedades comunes, también se le han atribuido beneficios en la prevención del cáncer, enfermedades cardiovasculares, procesos inflamatorios y afecciones del corazón.

Pero, ¿qué sabemos acerca de sus beneficios sobre el peso?

Recientes investigaciones de la Universidad del Oeste en Ontario (Canadá), han desvelado que tanto las naranjas como las mandarinas contienen un flavonoide (un grupo de fitonutrientes, químicos vegetales, que se puede encontrar en diversas verduras, frutas y especias) llamado nobiletina, que podría no solo reducir de forma muy significativa la obesidad si no también revertir sus efectos secundarios negativos.

Ha habido más investigaciones sobre la nobiletina (en la universidad de Gannan, en China, por ejemplo), gracias a las cuales se ha evidenciado que  es un agente farmacéutico multifuncional cuyas actividades farmacológicas incluyen neuroprotección, protección cardiovascular, trastorno antimetabólico, anticancerígeno, antiinflamatorio y antioxidante.

Después de estas y alguna otra investigación más, se llevó a cabo un experimento con ratones obesos. Se les alimentó durante 8 semanas con una dieta rica en grasas y colesterol y después trataron a algunos de ellos con nobiletina. Lo primero que pudieron observar fue que disminuyó el aumento de peso corporal, el tejido adiposo y los triglicéridos y mejoró la tolerancia a la glucosa.

Además, los ratones obesos que recibieron la nobiletina, respecto al resto, que se alimentó de lo mismo pero no la recibió, se veían notablemente más delgados, tenían menor resistencia a la insulina y contaban con menos grasas en la sangre.

Todavía no ha podido determinarse cómo actúa este flavonoide en nuestro organismo, lo que sí está claro es que los resultados en ratones fueron positivos y concluyentes. Ahora faltaría ensayar el comportamiento metabólico en humanos para poder valorar sus posibles aplicaciones en medicina.

Y ahora que sabemos algunas de las cosas que las naranjas pueden hacer por nosotros, lo importante es (y más en estas fechas marcadas por la covid), “protegernos” bien con un zumo de naranja en el desayuno (que aporta todas las necesidades de vitamina C diarias) o bien con una o dos piezas durante el día para aprovecharnos de todos los beneficios saludables que nos aporta esta fresca y sabrosa fruta e incluirla en todas nuestras dietas, ya sea por llevar una vida más sana o por perder esos kilos de más. Lo primero es y debe ser siempre, nuestra propia salud.